En Argentina cayó el consumo de pan, lácteos y carnes

Redacción
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Con menos recursos financieros, las familias argentinas experimentan cambios en su mesa. Un informe da cuenta de la caída de los principales insumos, ¿cuál es el efecto en el mercado interno?
Carnes, leche y pan son pilares de la pirámide alimenticia en Argentina, o al menos eso fue hasta hace algún tiempo. Según el informe presentado por la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM), el consumo de esos tres insumos elementales de la mesa nacional ha experimentado una importante caída en los últimos meses.

Concretamente, desde comienzos de 2024 el cayó un 17,5% el consumo de carne vacuna, un 14,5% de lácteos y un 45% de panificados. Esta disminución en el consumo de alimentos básicos se vincula con la situación económica que afecta al país, y se profundizó en los primeros seis meses del gobierno de Javier Milei.

Para entender la diferencia en el consumo, la Cámara de mayoristas sumó al informe, el dato sobre la la caída del 34,1% del poder adquisitivo del salario mínimo que publicó en abril el Centro de Investigación y Formación de la Central de Trabajadores de la Argentina (Cifra-CTA). El aumento constante de precios en los primeros meses de 2024 “habría ocasionado que muchos argentinos tengan que ajustar su presupuesto” y reducir la cantidad de alimentos que consumen.

Mal de varios
La caída en el consumo de productos básicos no solo afecta a los argentinos en términos de nutrición y salud, sino que también tiene un impacto en la economía del país. La baja demanda de estos alimentos puede afectar a los productores y distribuidores, así como también generar un desequilibrio en el mercado.

Según la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de Argentina, la producción de carne en los primeros cuatro meses del año aportó 988 mil toneladas, lo que arrojó una baja del 7,7% interanual. En ese contexto de baja, sobre una oferta de 324 mil toneladas se exportaron y 664 mil toneladas quedaron para el consumo interno, 17,5% inferior al registrado en el primer cuatrimestre del año pasado.

En el caso de los lácteos, la disminución abarcó a todos los productos, si bien la mayor, como “en los de mayor valor agregado y unitario como quesos de pasta muy blanda, quesos rallados, leches saborizadas, yogures, flanes y postres, estuvo asociada a las subas de precios y al retraso en el poder adquisitivo del sector medio de la población que demanda en mayor cuantía estos productos”, explicaron desde el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), a NA.

Completando el cuadro de alarma, el presidente del Centro Industrial de Panaderos de Merlo, Martín Pinto, estimó que “tenemos en todas las panaderías de la Argentina una caída del 45% en las ventas. La gente no consume”.

CRONICA.-

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