Un trabajo de lectura de datos de estaciones meteorológicas locales privados, de datos aportados por productores agropecuarios y de estadísticas que se conocen hasta el momento, confirmó que es la peor ola de calor que sufrió el Chaco en esta primera semana de enero, ya que superó en «récord de temperatura a la de marzo de 2024», confirmaron profesionales al grupo Agroperfiles.
En este sentido de situación climática, el ingeniero Dante Frank, un estudioso del clima del Chaco, viene realizando un seguimiento de este comportamiento que «se da y que ya viene generando severas complicaciones, sobre todo en la producción primaria», señaló el profesional.
CUATRO DÍAS CONSECUTIVOS CON 43 GRADOS
Según confirmó al mencionado grupo el ingeniero Frank, el día jueves 6 de febrero de 2025, por cuarto día consecutivo, las máximas superaron «los 43 grados en Sáenz Peña, estableciendo un récord absoluto jamás registrado en la región», aseguró el estudioso. A la par –continuó– fue el sexto día consecutivo con máximas superiores a 40 grados, que mucho menos había ocurrido, aclarando que «décadas atrás las máximas superaban los 40 grados un par de veces en el año, según datos del SMN y otros organismos, pero en forma consecutiva», indicó.
QUEBRÓ RÉCORDS
«La ola de calor de febrero ya ha quebrado varios récords históricos, y si ocurren las condiciones esperadas hasta el 12 de febrero, podemos pensar que sería difícil de superar», aseguró Frank. Quien dijo que «la ola de calor de marzo 2024 se creyó era difícil de superar, bueno el pasado miércoles, ese récord quedó atrás», se refirió. De la misma manera que «el récord de marzo 24 había dejado atrás la de enero-febrero de 2023, que a la vez había dejado atrás a la de enero 2022, vemos cómo las temperaturas van escalando con el curso de los años», se preocupó el profesional.
MÁS OLAS DE CALOR
En consecuencia y como conclusión de los datos estadísticos, Frank sostuvo que «es inevitable pensar que a futuro habrá más olas de calor si no se revierte la caída de humedales y bajante de ríos inducidos por actividad humana en la gran biosfera de Sudamérica», advirtió. La ola de calor de enero de 2022 había roto, lejos, triplicado las horas de calor sobre 40, según datos de un estudio de décadas atrás, que había realizado la Universidad del Litoral y el Servicio Meteorológico Nacional». «Lo único que podemos hacer es seguir investigando para tener más precisión de estos riesgos, e informar de ello, porque esto es algo que muchos lo saben, pero no se está informando», expuso.
DIARIO NORTE.-