Pocos minutos después de las 22 de sábado, una pareja se dispuso a comprar helado en la heladería Piacere, ubicada en la esquina de avenidas Italia y Paraguay de Resistencia.
En el comercio, ubicado en pleno centro de la capital chaqueña, no esperaban lo que iba a ocurrir. A las 22.08, según datan las mismas cámaras de seguridad, un delincuente ingresó con el casco puesto y con un arma de fuego, que sería un revólver.
La pareja, sorprendida, se echó al suelo, así como el trabajador heladero. El ladrón se llevó las pertenencias de los clientes, y en vez de helado, se llevaron la frustración de vivir en una capital donde la inseguridad se palpa día a día.
Quienes recorren la ciudad sin guardaespaldas, quienes deben moverse con sus propios vehículos de un punto a otro, o caminar hacia el trabajo o la escuela, viven esta realidad todos los días. A los ladrones no los amedrentan los días lluviosos ni nublados, ni se arrepienten de arruinarle el día a sus víctimas.
Mientras tanto, por el hecho de la heladería, la Policía del Chaco aseguró a NORTE que «personal de la Comisaría Primera se acercó al lugar para iniciar la investigación». Por tanto, no hay detenidos.
La inseguridad es insoportable en Resistencia, el aglomerado urbano más pobre del país, en donde la poca plata que se junta por laburar cada día pasa a manos de delincuentes en segundos. El violento asalto en la heladería fue una nueva muestra.
DIARIO NORTE.-
