El intendente de Resistencia inauguró las sesiones del Concejo Municipal con un fuerte mensaje a la comunidad; informando la herencia dejada por la gestión anterior y anunciando el plan para recuperar la ciudad del estado de abandono que encontraron al asumir. “Se terminó la fiesta”, enfatizó tras reconocer deudas por miles de millones.
“Me tendrán que disculpar por la cita personal, pero a mis 73 años, con toda una vida vinculada a lo político y a la administración de lo público creo que lo amerita, porque nunca en toda mi trayectoria he visto tanto daño, tanta desidia, tanta destrucción (y hasta podría decirse saña, bronca y mala intención), como lo han hecho con la Municipalidad de la ciudad de Resistencia”, dijo Roy Nikisch en el inicio mismo de su mensaje ante el cuerpo legislativo municipal.
Con un mensaje crudo y honesto, el intendente ratificó como oportuno “mostrar un panorama claro del estado de destrucción con el que nos encontramos, para poder cerrar el ciclo de diagnóstico y conducir a que la Patria demande a quienes incumplen con sus deberes de administrar honestamente los recursos del Pueblo”. “Dejaron una municipalidad igual a sus calles, rota; por un sistema de administración igual a los barrios, oscuro”, subrayó.
Antes de entrar en detalles de una administración que ya fue denunciada penalmente, el actual jefe comunal lamentó haber recibido “una ciudad intencionalmente colmada de basura porque cortaron completamente el servicio de recolección de residuos sólidos urbanos semanas antes de irse y los proveedores de camiones dejaron de prestar servicios por falta de pago. Una ciudad con obras paralizadas, o peor aún, licitadas y nunca puestas en marcha. Con empresas que se retiraron por falta de pago”.
Ante lo que el propio defensor del Pueblo de la provincia ya había definido como una “emergencia ambiental sin precedentes” ocasionada por el abandono de las obligaciones por parte de la gestión anterior, Nikisch insistió en la búsqueda de soluciones que permitan mejorar la prestación de los servicios: “Para ello se contó con el apoyo de Vialidad Provincial para sumar equipos a los pocos existentes para atacar la emergencia. Y en las semanas sucesivas iniciamos la contratación directa de equipos de empresas locales de acuerdo a la adecuación financiera de cada momento”.
DEUDAS MILLONARIA
Entre los puntos salientes del balance hecho por Roy Nikisch quedó plasmado el angustiante estado de situación financiera que se ha puesto como objetivo ir saneando. Con las 9 empresas adjudicatarias de la obra pública, Gustavo Martínez ha dejado deudas impagas que, sin sumar intereses por redeterminaciones de precios, asciende a $ 592.850.086,57. A eso debe sumarse las obras que fueron licitadas, contratadas y no iniciadas como plazoletas, parques urbanos, la extensión de la Peatonal y el centro de recuperación de equinos. “El año pasado, en este estrado, el ex intendente anunció que en pocos días comienza la obra de construcción de un centro de rehabilitación de equinos municipal. Si alguien vio un Eco Torky circulando por la ciudad me avisa”, ironizó Nikisch.
Además, se solicitó al Tribunal de Cuentas su intervención ante presuntas irregularidades por el Fideicomiso de Servicios Generales y Planificación Estratégica: Entre el 7 de agosto y el 17 de noviembre de 2023, se dictaron resoluciones de Intendencia de transferencia de recursos de la Municipalidad al Fideicomiso por el monto de $8.156.301.000; desconociéndose actualmente el destino de estos fondos. “Para que quede claro: La Fiesta de Gustavo Martínez la tenemos que pagar nosotros. No conformes con eso, nos dejaron deudas con cheques diferidos al 15 de marzo de 2023 por $1.109.407.965. Como diría el Gobernador: Otra bomba de mecha corta”, señaló Nikisch.
Tras recordar la mentira que significó el programa “Luces de Mi ciudad” y el estado lamentable en que quedó el Autódromo Yaco Guarnieri; NIkisch también se refirió a los 8720 juicios que pesan sobre la municipalidad.
Muchos de ellos tienen sentencias firmes; por lo que se deben pagar astreintes (multas diarias por incumplimiento demandas judiciales) por un monto de $75.345.938,08.
“Me tendrán que disculpar por la cita personal, pero a mis 73 años, con toda una vida vinculada a lo político y a la administración de lo público creo que lo amerita, porque nunca en toda mi trayectoria he visto tanto daño, tanta desidia, tanta destrucción (y hasta podría decirse saña, bronca y mala intención), como lo han hecho con la Municipalidad de la ciudad de Resistencia”, dijo Roy Nikisch en el inicio mismo de su mensaje ante el cuerpo legislativo municipal.
Con un mensaje crudo y honesto, el intendente ratificó como oportuno “mostrar un panorama claro del estado de destrucción con el que nos encontramos, para poder cerrar el ciclo de diagnóstico y conducir a que la Patria demande a quienes incumplen con sus deberes de administrar honestamente los recursos del Pueblo”. “Dejaron una municipalidad igual a sus calles, rota; por un sistema de administración igual a los barrios, oscuro”, subrayó.
Antes de entrar en detalles de una administración que ya fue denunciada penalmente, el actual jefe comunal lamentó haber recibido “una ciudad intencionalmente colmada de basura porque cortaron completamente el servicio de recolección de residuos sólidos urbanos semanas antes de irse y los proveedores de camiones dejaron de prestar servicios por falta de pago. Una ciudad con obras paralizadas, o peor aún, licitadas y nunca puestas en marcha. Con empresas que se retiraron por falta de pago”.
Ante lo que el propio defensor del Pueblo de la provincia ya había definido como una “emergencia ambiental sin precedentes” ocasionada por el abandono de las obligaciones por parte de la gestión anterior, Nikisch insistió en la búsqueda de soluciones que permitan mejorar la prestación de los servicios: “Para ello se contó con el apoyo de Vialidad Provincial para sumar equipos a los pocos existentes para atacar la emergencia. Y en las semanas sucesivas iniciamos la contratación directa de equipos de empresas locales de acuerdo a la adecuación financiera de cada momento”.
DEUDAS MILLONARIA
Entre los puntos salientes del balance hecho por Roy Nikisch quedó plasmado el angustiante estado de situación financiera que se ha puesto como objetivo ir saneando. Con las 9 empresas adjudicatarias de la obra pública, Gustavo Martínez ha dejado deudas impagas que, sin sumar intereses por redeterminaciones de precios, asciende a $ 592.850.086,57. A eso debe sumarse las obras que fueron licitadas, contratadas y no iniciadas como plazoletas, parques urbanos, la extensión de la Peatonal y el centro de recuperación de equinos. “El año pasado, en este estrado, el ex intendente anunció que en pocos días comienza la obra de construcción de un centro de rehabilitación de equinos municipal. Si alguien vio un Eco Torky circulando por la ciudad me avisa”, ironizó Nikisch.
Además, se solicitó al Tribunal de Cuentas su intervención ante presuntas irregularidades por el Fideicomiso de Servicios Generales y Planificación Estratégica: Entre el 7 de agosto y el 17 de noviembre de 2023, se dictaron resoluciones de Intendencia de transferencia de recursos de la Municipalidad al Fideicomiso por el monto de $8.156.301.000; desconociéndose actualmente el destino de estos fondos. “Para que quede claro: La Fiesta de Gustavo Martínez la tenemos que pagar nosotros. No conformes con eso, nos dejaron deudas con cheques diferidos al 15 de marzo de 2023 por $1.109.407.965. Como diría el Gobernador: Otra bomba de mecha corta”, señaló Nikisch.
Tras recordar la mentira que significó el programa “Luces de Mi ciudad” y el estado lamentable en que quedó el Autódromo Yaco Guarnieri; NIkisch también se refirió a los 8720 juicios que pesan sobre la municipalidad.
Muchos de ellos tienen sentencias firmes; por lo que se deben pagar astreintes (multas diarias por incumplimiento demandas judiciales) por un monto de $75.345.938,08.